La reunión del Domingo 22 de Marzo fue muy especial por varios motivos.
Tuvimos la visita de Miguel Mendoza y familia quienes actualmente están trabajando para el Señor en Charo,Michoacán y también de Chuy y América de Salamanca.
Miguel nos compartió una enseñanza acerca del “Discipulado”, que resulta muy aplicable para los días que estamos viviendo en medio de la contingencia, porque uno de los temas que abordó era el discipulado en la familia y con nuestros hijos; Ya que estamos pasando más tiempo en casa tenemos la oportunidad de aprovechar invirtiendo espiritualmente en la familia, él mencionó una frase que me impacto mucho respecto a la relación padres- hijos: “En el discipulado de nuestros hijos, enseñamos lo que sabemos, pero reproducimos lo que somos”. Es muy cierto que nuestros hijos son muy parecidos a nosotros, y si lo vemos de esta manera tenemos una gran responsabilidad.
Otro motivo que hizo tan especial este tiempo fue porque sabíamos que esta era la última reunión juntos por algún tiempo, y eso nos hacía saborear cada alabanza, cada participación, y la comunión entre hermanos al compartir los alimentos. Esperamos en el Señor poder volver a disfrutar pronto de estas reuniones presenciales, que nuestro Dios tan sabiamente diseño para Alabanza de Su Nombre y beneficio nuestro.
¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!